Los seres humanos, como el resto de seres vivos, somos un sofisticado sistema químico. Todo nuestro funcionamiento y nuestra naturaleza depende de reacciones químicas. Estamos hechos además de los mismos materiales que el polvo de las estrellas. Sí, somos polvo de estrellas, más polvo enamorado. Polvo que se enamora. Que siente, que piensa, que crea, que observa y analiza todo lo que le rodea. Así que con una mirada enamorada y conmovida charlamos con la divulgadora Deborah García Bello de su libro "La Química de la bello".