Nuestra invitada nos comparte una experiencia muy sentida. De qué manera una canción puede terminar siendo un refugio, una fortaleza imaginaria donde nadie nos haga daño.
Nos sirve de excusa para analizar un par de antídotos, la história y la biología, para combatir la estupidez humana.
¿Tienes una canción que te evoque momentos especiales? puedes escribirnos a evocanciones@gmail.com